[Carrusel Bloguero] Por los cerros de Úbeda

El grupo se acerca a la oscura mansión que está sumergida en tinieblas, y se erige en la noche como el esqueleto de una terrible bestia a punto de devorar a los curiosos. Pero los investigadores, tenaces y persistentes, se aproximan a ella, olvidando el temor. Después del largo camino, parece que la aventura acaba en esos momentos. Algún individuo solitario observa con horror como se acercan, y no pasa desapercibido para el grupo que son observados desde el exterior…

– Eh, ¡eh! ¿Quién es ese? ¿Qué es lo que hace ahí?
– ¡Acércate y pregúntale!
– ¿Y que pasa con la mansión?
– Olvídalo, ¡ese podría ser el villano!

Y entonces es cuando el máster o DJ, puede optar por improvisar a partir de la estúpida idea de introducir un NPC sin relevancia ninguna o… tumbar la mesa y huir de los jugadores que tan vilmente han ignorado la aventura preparada a todas luces.

Porque a veces no podemos evitar que los jugadores se vayan por los cerros de Úbeda, que es el tema de febrero en el Carrusel Bloguero, propuesto por TPFGénesis. Aparte de las opciones anteriormente propuestas en este post, podemos improvisar hasta esperar a poder redirigirlos al objetivo llamado principal, con nuevas pistas, otros personajes que los lleven al lugar. Pero no siempre funciona. Por lo que puedes tomar un tiempo para remodelar tu estrategia, por así decirlo, pero se puede perder algo del ambiente de terror, misterio que se haya creado.

Cuando estoy dirigiendo en mesa, soy partidaria de que los jugadores tengan libertad de acción. Previamente, he creado un esquema de lo que sucederá en la sesión, para hacerme de guía, no de guión. Al fin y al cabo, los sucesos que tengan lugar en la aventura no son eventos aislados. Tarde o temprano se cruzarán con ellos, o les llegará información de que va a suceder. Ahí puedes introducir algún PNJ o NPC que los guíe poco a poco, si es que están muy perdidos en la trama o no saben como empezar.

También puede darse el caso de que el jugador se percate de que no tiene interés en la partida, y decida reventar la trama o distraerse/distraer con otros temas que pueden destruir el ambiente. En ese caso, habrá que sacar algún gancho, algún evento que haga captar la atención de todos, o al menos, consientan en colaborar. Algo de humor, información fluida, pruebas no demasiado complicadas (no todas, claro). Todo es cuestión de comunicarse con los jugadores, dejar las cosas claras, y la partida debería fluir con normalidad y al final, con el objetivo cumplido, pasar un buen rato.

Tampoco hay que agobiarse. Aunque corta experiencia tengo, considero que las aventuras preparadas de punta a punta son un error. Limitan a los jugadores, estresan al director de juego y la partida puede enfriarse. Soltarse, relajarse e improvisar, todos nos distraemos alguna vez, y ocurre incluso en módulos de juego oficiales. La cuestión es pasar un buen rato y que la aventura atraiga y resulte interesante.

Espero que disfruten leyendo mi primera contribución al Carrusel Bloguero de los Juegos de Rol, nos veremos en las siguientes.
See U!